jueves, 19 de mayo de 2016

Caminante

Tan solo caminando, dijo con sencillez, pero su rostro se heló
Ray Bradbury, El caminante




Una patrulla persigue al caminante
camina para nada
porque sí
en ese futuro próximo la pantalla
azul ilumina los interiores
y el caminante pasa
su cabeza está llena de libros,
de calles
La noche, los libros, el camino
Es un hombre viejo

Soy una mujer vieja
pero
la pantalla viaja conmigo
mi cabeza está llena de libros, 
de noche, de caminos.

Que venga la patrulla

miércoles, 18 de mayo de 2016

Solitario spider

Jugaba solitario spider en los 2000
qué se puede hacer cuando el mundo está por acabarse
las reglas imponen (permiten) asociaciones no permanentes
entre los dos colores rivales
las cartas rojas y las cartas negras pueden superponerse
por un tiempo
hasta que es necesario separarlas para formar las pilas ordenadas
me volví hábil
ya no me importaba ganar
sino llevar al máximo el riesgo de juntar negras y rojas
para extremar la dificultad

mientras jugaba compulsivamente
una historia se contaba en mi cabeza
la historia era simple
las rojas eran huestes de un amante apasionado
mujeriego y seductor
en pelea con dios constante
incapaz de retirarse de la sinagoga
a la vista de su madre

Las negras eran monjiles hijas de maría
Que amparaban hasta cierto punto
A una chica del conurbano
Con ganas de revolear la chancleta
Pulcramente bordada
Por su mamá

Los dos mundos no debían contaminarse
No se contaminaron
Hasta que
pasados los cuarenta y
Con familias debidamente constituidas
Cruzaron el cyberespacio los heraldos
De la lujuria

Y todo se fue al carajo
La monja de las cartas negras se permitió soñar
El soldado rojo estaba harto de las aventuras guerreras

Sos una adicta, me decía me marido

Tremendamente lúcida, yo sabía que al final del juego
Las cartas volverían a acomodarse en las convencionales pilas
Pero era incapaz
De dejar de jugar